198.
ir a arar. Calzado que utili-
zaban tanto la mujer como
el hombre.Y aún siguen
usando las madreñas, quizá
ya no las de escarpín, pero
si las de zapatilla que son
más modernas. Muy buenos
madreñeros había en la
Montaña, no se si quedará
ya alguno trabajando, llega-
mos a conocer varios en
Omaña y en Laciana. Los
dibujos de las madreñas
lacianiegas y omañesas son
una verdadera obra de arte.
En lugares con el terreno
muy quebrado, las madre-
ñas se herraban con grandes clavos que hacía el herrero del pue-
blo. Nos lo recuerda esta canción de las riberas del Luna:
Fierra las madreñas altas,
mocina, que eres pequeña,
tienes muita vanidade
y no ties donde metela.
joyas
Las joyas no abundan en la Montaña, son más propias
de Maragatería, Riberas del Órbigo y tierras bañezanas. Sin
embargo, en todas las comarcas leonesas se hallan pendientes
circulares de plata con piedra verde o collares de corales, que
generalmente eran regalo del novio para la boda.
Los pendientes tradicionales suelen ser: los circulares,
las calabazas y las polcas. Los pen-
dientes circulares son de un solo cuer-
po en forma de aro plano; en el espacio
interior, muchas veces, un colgante en
forma de paloma. Quizá un pendiente
más arcaico sea ese gran aro de plata
con un colgante triangular y plano, que
reflejaron grabadores del siglo XIX, y
Foto: Collar