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En la cola del embalse de Matalavilla aún se identifican varios
de los canales que describe el río Valseco, en especial cuando
el nivel de agua es bajo.
Localidad/punto de acceso:
Matalavilla
Municipio:
Palacios del Sil
Punto de observación:
Cola del embalse de
Matalavilla
Coordenadas:
Huso 29; X 711635; Y 4745822
Pc C O S D Ca P T J Cr Pa N Q
Estratig.
Tectónico
Paleont.
Mineralog.
Geomorfológico
Glaciar
Fluvial
Kárstico
Otros
Los canales trenzados del río Valseco
Son varias las infraestructuras para producción eléc-
trica que se suceden en el Alto Sil. El embalse de Ma-
talavilla, productivo desde 1967, recoge las aguas del
río Valseco y las deriva hacia la central hidroeléctrica
de Las Ondinas donde, gracias al desnivel de casi 160
metros existente entre el embalse y la central, llegan
con fuerza suficiente para mover las turbinas y generar
electricidad. Sin embargo, el coste ambiental que im-
pone la producción de energía es elevado; para llenar el
embalse de Matalavilla es necesario captar también el
caudal de otros ríos y arroyos, como son los de Salen-
tinos, Matalavilla, la Seita y Reguera Durria. Incluso el
río Sil ha visto mermado su caudal tras la construcción
de la presa, pues un sistema de conductos subterráneos
trasvasa su agua desde el embalse de Las Rozas, situado
unos 10 kilómetros aguas arriba, hasta allí. Todos estos
ríos, incluido el Sil, se ven así privados de gran parte de
su caudal a partir de los puntos donde sus cauces han
sido modificados; incluso pueden aparecer temporal-
mente secos en años de poco aporte.
Embalse de Matalavilla.
Dos instantes de la evolución de un sistema de canales
trenzados. Con el tiempo, las barras pueden cambiar de tamaño
y posición, por lo que los canales ven modificada su trayectoria,
desaparecen, o surgen canales nuevos.
El fondo del valle del río Valseco aparece cubierto
por sedimentos poco consolidados, en especial en el
sector donde se ha construido el embalse. Estos sedi-
mentos proceden de zonas más altas, de la erosión por
el río y sus afluentes de las morrenas que en su día acu-
mularon los glaciares y del transporte de los materiales
que las formaban.
Dado que el fondo del valle tiene poca pendiente, el
río Valseco no ha tenido la energía suficiente para tra-
zar un cauce profundo y bien definido, sino que discurre
formando “canales trenzados”, es decir, una serie de ca-
nales sinuosos de pequeño tamaño que se entrecruzan
una y otra vez, dejando entre ellos pequeñas zonas no
sumergidas o “barras fluviales”.
Además, dado que los sedimentos están poco con-
solidados, es frecuente que, con el paso del tiempo,
estas barras cambien de morfología, sobre todo tras
grandes avenidas, lo que provoca que la configuración
de los canales se modifique año tras año, dando lugar
a un “lecho móvil”.
Aunque la mayor parte de los canales del río Valse-
co han sido relegados al fondo del embalse de Matala-
villa, en su cola aún pueden verse buenos ejemplos de
este tipo de cauce fluvial, en especial cuando la reserva
de agua del embalse es escasa.