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SECUNDARIA
-toque de ángel: cuando el fallecido era un niño, antes de haber recibido la comunión
-toque de arrebato: para pedir ayuda ante un incendio o cualquier otro siniestro
7- FIESTAS TRADICIONALES, UN ANTES Y UN DESPUÉS
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S@BHNM@KHC@C CD KNR SQ
@A@INR L@QB@A@ LTBGNR LNLDMSNR CD
BDKDAQ@BH®M +@R ƥDRS@R CD TM
tipo u otro, siempre han dado pie a la socialización entre los vecinos, no solo de la propia
localidad, sino también de las cercanas, ayudados, si el motivo de celebración lo permitía,
por los bailes, canciones y juegos. Los pendones y/o los ramos siempre han tenido un pro-
tagonismo importante en muchas festividades de la provincia de León, y en particular de
las comarcas de Cuatro Valles. Para más información, consultar este apartado en la “guía
CDK OQNEDRNQŚ CD
OQHL@QH@OFHM@R X
S@LAH¤M OTDCD QDRTKS@Q µSHK K@ ř&T¨@ CD ƥDRS@R
y ferias de las comarcas de Cuatro Valles”.
8- ¿QUIÉN SE LA QUEDA?
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NB@RHNMDR NQF@MHY@MCN
competiciones con los vecinos de las localidades cercanas. Muchos juegos están relaciona-
CNR DM RT NQHFDM BNM NƥBHNR
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-Los herreros jugaban al juego de la herradura, lanzándola a larga distancia
-Los agricultores a la monterilla, lanzando su cachava
-Los pastores jugaban a la calva, lanzando el “marro”
-Los molineros jugaban a la barra, lanzando una pesada barra de hierro
La descripción de estos y otros juegos se puede encontrar en el manual “Juegos tradicio-
nales de las comarcas de Cuatro Valles”
(ver materiales complementarios en web)
, incluidos los
aluches y las distintas modalidades del juego de los bolos presentes en este territorio, que
se pueden deducir de las fotos y descripciones aportadas:
Bolo leones: foto nº 2; Pasabo-
los: foto nº 3; Bolo maragato: foto nº 1.
9- EL VALOR DE LA TRADICIÓN
Las actividades e investigaciones realizadas hasta este punto de la programación habrán
permitido aumentar los conocimientos sobre algunas de las costumbres y tradiciones de la
propia localidad, y también del resto de comarcas; un conocimiento que puede contribuir a
cambiar el punto de vista y apreciación de las mismas, pues si se ha conseguido la puesta
en valor perseguida, serán consideradas con facilidad como parte del patrimonio material
e inmaterial que conforma la identidad de su propia comunidad.
Si bien este es un objetivo claramente perseguido, las costumbres ligadas a la vida tradicio-
nal pueden y deben ser valoradas por otros motivos, aunque sea desde un punto de vista
más egoísta, pues muchas de ellas son fuente de recursos económicos.
+@R ƥDRS@R QNLDQ¨@R X EDQH@R RHFTDM RHDMCN TMN CD KNR LNSHUNR ONQ KNR PTD K@ FDMSD UTDKUD
a los pueblos, tanto lugareños como turistas; visitantes que revitalizan la economía local.
Planteado el interés, en este punto conviene pensar sobre el tipo de turismo que se quiere
@SQ@DQ#DA@SHQ
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L@RHƥB@CN X CDK STQHRLN
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opción y otra, a cuál de ellas es más fácil que resulten atractivas las costumbres y tradicio-
nes arraigadas en una localidad, etc. También ayudará discutir sobre el tipo de medidas a
adoptar para promover el tipo de turismo elegido, pues suelen preferir un entorno acorde
y coherente con sus inclinaciones.
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