escucha, atendiendo a los
estrepitosos
cencerros
que
los
“zafarrones”
portan
sujetos a sus cinturas duran-
te la
zafarronada
o carnavala-
da. Tampoco debemos olvidar la
mención de otros instrumentos
infantiles más modestos, marcados
por un claro carácter funcional e, inclu-
so, protector según la creencia, como son
los
sonajeros
y
rugideros
infantiles. Otros, dotados con el
mismo carácter funcional y de servicio a la comunidad, son los
cuernos o
turullos
, hoy prácticamente desaparecidos, utilizados
tradicionalmente para emitir ciertas señales acústicas ligadas a
tareas fundamentales para la organización social diaria de estas
comunidades, como por ejemplo la
“vecera”
.
Respecto al
canto anónimo en el baile
, sus protago-
nistas habituales, los músicos ocasionales, se acompañaban
generalmente de instrumentos idiófonos y membranófonos,
salvo en ocasiones contadas en las que se contrataba a un músi-
co profesional de los referidos al principio. En Laciana, algunos
de estos se acompañaban con la curiosa
trompa
-birimbao o
arpa de boca-. En esta comarca y más lugares, con frecuencia lo
hacían con las diminutas castañuelas conocidas como
pitos
, con
las
castañuelas
, de infinidad de tamaños y diseños formales, o
con los
castañolones
, presentes en toda la montaña. Al conjun-
to se añade la intervención de un grupo fundamental: las mozas
y señoras conocidas como las
“pandereteras”
. Éstas obtenían
buenos y variados ritmos para bailar, provocando el son de los
membranófonos representados por las
panderetas
y los gran-
des y graves
panderos redondos
. Las primeras, de forma redon-
da, de un parche, de todos los tamaños posibles, y provistas ine-
ludiblemente de
sonajas
. Los segundos, los panderos, de mane-
ra peculiar y atípica se construyen en Babia y Laciana bajo
medievales formatos cuadrados, de doble parche, similares a
los de ciertas áreas portuguesas como el Alentejo..
lo que se puede escuhar y presenciar
La herencia del pasado: tipos de bailes y danzas
En Omaña, Babia, Luna, Laciana y Alto Sil, los géne-
ros de baile propios en la tradición han sido el
“txano”
o
baile
chano
, las similares
jotas babiana
,
omañesa
y
lacianiega
, y la
careada
. Todos ellos son bailes severos, cuyos bailadores se
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Foto: Almirez