Background Image
Previous Page  61 / 227 Next Page
Basic version Information
Show Menu
Previous Page 61 / 227 Next Page
Page Background

52.

Monte del Castro y detenerse en la ermita de Santa Lucía, hoy

en ruinas, entrar finalmente en La Devesa y Llanos, al pie de

célebre castillo de Alba. En la parroquia de Llanos se guarda

celosamente la talla policromada de Santiago Matamoros, que

preside el retablo mayor, y que la tradición vincula a las haza-

ñas del Capitán Tusinos y una gran batalla contra los moros

que, una vez derrotados y convertidos gracias al Apóstol, fun-

daron la aldehuela de Santiago, cerca de la fortaleza.

el valle de gordón

A partir de Peredilla, ya en el valle de Gordón, el

camino discurría más holgadamente por la vega del Bernesga,

atravesando la pulcra ermita del Buen Suceso, patrona de

Gordón, y la villa de Huergas-El Millar, para entrar finalmente

en la capital concejil, la próspera villa de La Pola de Gordón.

Es éste uno de los tres lugares citados entre León y los puertos

por el itinerario francés de 1718, junto con Buiza y Arbas, y

sabemos por el Catastro de Ensenada que contaba a mediados

del XVIII con un hospital

para peregrinos y pobres,

cuya fundación, según se

afirma entonces, era muy

antigua. En La Pola, el

camino se bifurcaba de

nuevo, separándose del

cauce una de las variantes,

cruzando el célebre Puente

del Tornero, junto al que

creció el primitivo núcleo que dio origen a la puebla, y que es

denominado en el siglo XII, precisamente, La Ponte. Venía

luego la aldea de Beberino, cuyo vecindario se ocupaba del

mantenimiento de la obra del puente y la calzada, y donde exis-

tió otra ermita más dedicada a la Magdalena, con su correspon-

diente cofradía, en la cual, nos dice Madoz, se reunía la com-

pañía de los Doce Clérigos Nobles de Gordón. Y luego Buiza,

por donde el Camino seguía la vieja calzada romana de la que,

en algunos tramos, todavía pueden verse los enlosados de la

obra primitiva, pese a las mejoras emprendidas en el siglo XVI

por el obispo de Oviedo fray Diego de Muros. El paraje es

denominado San Antón, y allí afirma la tradición que existió un

convento, al lado del Camino Real, acaso vinculado a la Orden

de San Antonio Abad, y junto a él un mesón, lo que hace pen-

sar que fue el lugar de asiento del hospital para peregrinos que

se cita en esta aldea en el XVIII, y que estaba dotado con algu-

Foto: Ermita del Buen Suceso