

la presencia de un sinfín de
pequeños invertebrados
como gusarapas, tricóp-
teros, libélulas y gusa-
rapines que son
muy sensibles
a cualquier va-
riación en la
t empe r a t ur a ,
pH, cantidad
de materia or-
gánica disuelta,
fosfatos y otros
contaminantes,
cuyo control
es fundamental
para la conser-
vación del frá-
gil equilibrio
del ecosistema
ribereño.
el bosque mixto
Si hay un aspecto natural en el que destacan Laciana y el Alto Sil, ése es, sin
duda, el magnífico estado de conservación en el que se encuentran sus bosques.
Robledales mixtos en los que proliferan una gran diversidad de especies arbóreas
como hayas, mostajos, tilos, serbales, fresnos, saúcos, tejos, acebos, abedules o
arces, entre otros, acompañan a los robles albares y carballos.
Si el dosel arbóreo es
variado, otro tanto ocurre
con las especies arbustivas
y herbáceas que proliferan
en el sotobosque. Pero la
diversidad del bosque está,
en gran medida, ligada a
la riqueza del suelo sobre
el que se asienta, en el que
multitud de pequeños seres
como hongos, microorga-
nismos descomponedores
y diminutos invertebrados
14.
Roble
y osezno
Acebo