Y
a desde la Edad Media la tru -
cha se había convertido en un
pescado de gran consumo. Los
señoríos feudales y los monaste -
rios ejercieron su poder sobre los
cursos fluviales y lacustres, de
tal forma que explotaban directa -
mente o arrendaban tramos de
ríos llamados pesquerías. Los
derechos a pescar y los abusos
que se cometieron en perjuicio
del pueblo llano, originaron más
de un pleito, conocidos en la
historia de León.
Se sabe también que la impor -
tancia de este pescado hizo posi -
ble que se pudiese realizar el
pago de los “censos” con tru -
chas, como así consta en distin -
tos Fueros o en el libro de Las
Partidas de Alfonso X El Sabio.
También los propios Concejos a
través de sus Ordenanzas, regu -
laron la pesca estableciendo
vedas y sistemas prohibidos de
captura, que luego se verían
reforzados por sucesivas
Provisiones Reales.