Geológico, permiten observar el mode-
lado fluvial y kárstico, así como el
fuerte plegamiento de los estratos; o
la ascensión al Fontañán, que con
sus 1.629 m fue un punto estratégico
durante la Guerra Civil y conserva
restos de las trincheras empleadas en
la contienda. A su paso por La Robla,
el río divide el territorio entre el valle
de Fenar, a levante, y la Tierra de Alba,
a poniente.
Los ríos Rodiezmo y Casares, prin-
cipales afluentes del Bernesga, unen
sus fuerzas al cauce principal a la
altura de Villamanín y La Pola de
Gordón respectivamente. Ambos tribu-
tan sus aguas por la margen derecha,
lo que acentúa la marcada disimetría
que manifiesta el valle. Al igual que
en otros ríos nacidos en la Cordillera y
vertientes al Duero, esta erosión dife-
rencial parece tener su origen en otras épocas geológicas, cuando el clima era más
frío y fuertes vientos del oeste batían la orilla izquierda despejándola de nieve, que
tendía a acumularse en la derecha. Este efecto, muy patente a la altura del muni-
cipio de Cuadros, ha tenido como resultado que la margen izquierda del Bernesga
presente pronunciadas cárcavas, mientras que la derecha se prolonge suave en una
sucesión de terrazas y llanuras de inundación.
14.
Plegamientos
Enebrales rastreros en el Fontañán